En abril del 2010 una joven salía de trabajar y emprendía el camino de regreso a su casa en su bicicleta. Unos ladrones le quisieron arrebatar su bolso y ella pierde el equilibrio, pierde su vida. La joven se llamaba Marianela y desde aquel día su madre, Graciela, convirtió su dolor en la motivación incansable para encontrar justicia por aquel hecho.

Pasaron casi 10 años de aquella escena, la lucha de Graciela sigue intacta y su pedido por encontrar justicia sigue en pie.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *