Sotheby ‘s vendió la acuarela original realizada por el artista Thomas Taylor que ilustró la portada de la primera edición inglesa de Harry Potter y la piedra filosofal. «Esta acuarela es donde todo comenzó», indicaron desde la casa de subastas.

Según informó la casa de subastas, cuatro personas pujaron telefónicamente durante diez minutos hasta llegar a ese precio, el más alto jamás conseguido por un objeto relacionado con el popular personaje creado por la escritora británica J.K. Rowling en 1997.

La acuarela -donde se pinta por primera vez a Harry Potter como un niño con gafas, con cabello castaño y una bufanda de rayas roja y amarilla- se había subastado en Londres en 2001 y también había cuadruplicado las estimaciones al venderse en 85.750 libras.

En esta ocasión, ha sido puesta a la venta por el coleccionista Rodney P. Swantko, junto a piezas de literatura de Europa y EEUU de los siglos XIX y XX.

Datos curiosos de la ilustración

En 1996, Taylor tenía apenas 23 años y recién se había graduado de la Universidad Anglia Ruskin de Cambridge cuando se acercó a dejar una muestra de su trabajo a la editorial Bloomsbury.

Fue el editor Barry Cunningham el que puso a trabajar a Taylor junto a la entonces desconocida J.K. Rowling para sacar por primera vez una imagen del joven mago que se convertiría en un fenómeno a nivel mundial con una saga que fue traducida a 80 lenguas, que lleva vendidos más de medio millón de ejemplares, que se transformó en películas, juegos, una obra de teatro y que próximamente llegará a la pantalla chica con una serie.

“Esta acuarela es donde todo comenzó”, dijo la vicepresidenta asistente de Sotheby ‘s, Kalika Sands, en referencia a “todo el concepto del merchandising” del universo del mundo mágico.

La obra original -que tiene algunas diferencias con la que finalmente se publicó en la primera tapa de Harry Potter– muestra al joven mago que contempla sorprendido el tren que lo llevará a Hogwarts, la escuela de magia y hechicería, ubicado en el andén 9 ¾ en medio del humo de la locomotora.

Sands señaló que un “punto de interés” es la bufanda roja y amarilla que viste Harry. “Son claramente los colores de Gryffindor, pero en esta parte de la novela aún no había llegado a Hogwarts ni había sido seleccionado para una de las casas”, resaltó. Para la ejecutiva de Sotheby ‘s, la imagen anticipa al lector algo de lo que va a suceder en el libro.

“El cliché dice que no hay que juzgar a un libro por su portada, pero en este caso probablemente deberían hacerlo”, aseguró.

Fuente: De Página 12.